La inflación en la Ciudad de Buenos Aires profundizó en octubre su desaceleración. Luego de la caída de 0,2 puntos en septiembre (fue del 4% mensual), el IPC porteño perforó finalmente ese piso y se ubicó en el 3,2% el mes pasado, impulsado por una caída en el ritmo de aumentos entre los bienes (2,2%) y los precios estacionales (0,6%).